Medición de la viscosidad en la industria química

Se bombea una solución de resina desde un depósito a una bandeja de aplicación abierta y, posteriormente, vuelve al depósito. Este circuito garantiza que el rodillo de aplicación reciba siempre resina fresca y homogénea. La bandeja cuenta con un rodillo de aplicación que extiende la resina sobre material de soporte, donde la distribución uniforme es crucial para asegurar la calidad del producto final. En una producción rentable, la capa de resina no debe ser más gruesa de lo necesario. Como la bandeja está abierta, el disolvente se evapora gradualmente, lo que provoca un aumento de la viscosidad con el tiempo. Integrando el viscosímetro ViscoScope®en línea, cualquier cambio podrá ser detectado y dependiendo del diseño de integración, permitirá añadir disolvente de forma automática o manual para ajustar la viscosidad de nuevo al nivel óptimo.

Las losas de acero se laminan en chapas de diversos tamaños y calidades, por ejemplo, para su uso en la construcción naval, en alta mar o la fabricación de tuberías. Después del enderezamiento, las chapas se marcan con un código para garantizar que se cargan correctamente en el tren de laminación, asegurando que los componentes puedan ser identificados correctamente por el cliente. Una cabeza de marcado aplica la pintura, que se mezcla y almacena en contenedores de 20 litros, a la chapa.

Los cambios diarios de temperatura en el taller de laminado y la pérdida de disolvente afectan a la viscosidad de la pintura. Sin embargo, esta debe mantenerse dentro de un margen estrecho para evitar que el tipo de letra de la marca cambie o incluso se vuelva ilegible debido a un tiempo de secado excesivo o a escurrimientos. Dado que no es factible controlar la temperatura de la pintura, la viscosidad se ajusta añadiendo disolvente o pintura.

Hasta ahora, la viscosidad se medía de 2 a 3 veces al día utilizando una copa de flujo DIN. En una operación de tres turnos, los resultados suelen ser muy diferentes, por ejemplo, porque las mediciones durante el turno de noche se realizan a una temperatura más baja y la pintura ya está considerablemente más caliente al final del turno de mañana.

Un viscosímetro de proceso ViscoScope® puede medir continuamente la viscosidad de la pintura y mostrar su tendencia, lo que permitirá al operardor ajustar la viscosidad al nivel óptimo durante el día.